Acuerdo histórico en la OMS para prevenir y combatir futuras pandemias
Después de más de tres años de negociaciones, los países miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobaron el miércoles un acuerdo histórico para prevenir y enfrentar pandemias.
"Esta noche marca una etapa importante en nuestro viaje juntos hacia un mundo más seguro", declaró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, a los delegados reunidos en Ginebra a las cuatro de la madrugada (02H00 GMT).
"Las naciones del mundo han hecho historia hoy", celebró.
La agencia de salud de la ONU explicó que sus miembros dieron "un gran paso adelante en sus esfuerzos por conseguir un mundo más seguro frente a las pandemias".
El proyecto acordado ya bien entrada la madrugada "se debatirá en la próxima Asamblea Mundial de la Salud, en mayo", indicó la OMS.
Cinco años después de la irrupción del covid-19, con millones de muertes y un colapso económico mundial, el pacto debe servir para preparar mejor al mundo, lejos de estar equipado para afrontar una nueva pandemia, según la OMS y los expertos.
La importancia de las negociaciones se acentuó en los últimos meses ante el surgimiento de nuevas amenazas sanitarias como la gripe aviar, el sarampión y el ébola.
Con este acuerdo, destacó Tedros, también se demuestra que "el multilateralismo está vivo y bien, y que en nuestro mundo dividido, las naciones todavía pueden trabajar juntas para encontrar un terreno común y una respuesta compartida a las amenazas comunes".
La recta final de las negociaciones se desarrolló en un contexto de crisis del orden internacional y del sistema de salud mundial, provocado por los recortes a la ayuda humanitaria decretada por el presidente estadounidense Donald Trump.
El magnate republicano, que ordenó el retiro de Estados Unidos de la OMS, también amenazó con imponer aranceles a los productos farmacéuticos.
- "Adoptado" -
Las negociaciones, realizadas de forma híbrida, avanzaron más lentamente de lo previsto este martes, después de tres días de pausa. El principal escollo era la transferencia de tecnología para la fabricación de productos de salud ligados a las pandemias, sobre todo en beneficio de los países en desarrollo.
Ese tema fue motivo de numerosos reclamos de los países más pobres durante la pandemia del covid-19, cuando vieron cómo los ricos acaparaban vacunas y test diagnósticos del coronavirus.
Varios países donde la industria farmacéutica representa parte importante de su economía se oponen a la transferencia obligatoria e insisten en su carácter voluntario.
Finalmente se alcanzó un consenso sobre el principio de la transferencia tecnológica "de mutuo acuerdo".
Otra de los aspectos principales del texto es la creación de un "sistema de acceso y participación en los beneficios de los patógenos" para que las empresas farmacéuticas puedan disponer de estos datos y empezar a trabajar rápidamente en productos para luchar contra pandemias.
El proyecto acordado de 32 páginas busca también ampliar el acceso a estos productos estableciendo una red mundial de cadena de suministro y logística.
"Es un acuerdo histórico para la seguridad sanitaria, la igualdad y la solidaridad internacional", declaró Anne-Claire Amprou, copresidenta de las negociaciones y representante de Francia.
Con fatiga y emoción en el rostro, fue la encargada de anunciar la fumata blanca ante los aplausos de los participantes: "fue adoptado".
En lo que respecta a la implementación del acuedo, la principal organización del sector farmacéutico subrayó que la propiedad intelectual y la seguridad jurídica son esenciales para asegurar las inversiones del sector.
"Esperamos que en negociaciones posteriores, los Estados miembros mantendrán las condiciones que permiten al sector privado continuar innovando contra los agentes aptógenos susceptibles de provocar una pandemia", dijo David Reddy, director general de la Federación Internacional de la Industria del Medicamento.
El jefe de la OMS se unió a las negociaciones al final de la jornada del martes y aprovechó para defender ante la prensa un texto "bueno", "equilibrado" y que traería "mayor igualdad".
Reconoció que las medidas de coordinación para la prevención pandémica pueden resultar costosas, pero aseguró que "el costo de la inacción es mucho mayor".
"El virus es el peor enemigo, puede ser peor que una guerra", aseguró Tedros.
B.Rojas--GM